Jorge De Abreu nació en Caracas tres días después del asesinato de Kennedy, razón por la cual nunca se conocieron. Es un biólogo graduado en la Universidad Simón Bolívar y con maestría en ciencias biológicas en la misma universidad, quizás esto explique en parte que su conducta resulte a veces inexplicable. Su condición de biólogo lo inclina hacia la comunión con la naturaleza, pero su especialización en bioquímica lo aleja de los campos y lo mete de cabeza en los laboratorios donde no se ve la luz del sol. Su trabajo en bioquímica se ubica en el área nutricional; comenzó su carrera científica con ratas y luego por las jaulas pasaron conejos y hámsteres. Desde 1998 trabaja con niños, así que, evolutivamente hablando, ha experimentado un ligero progreso.
Su entrada a la Ciencia Ficción fue tardía: tenía 19 años cuando leyó Fundación. Un amigo vehemente y entusiasta del género obró el milagro de la conversión, para perdición del resto de los mortales que realmente amamos la Ciencia Ficción. Sus primeros relatos datan de bachillerato, la mayoría incompletos fragmentos de historias escolares de fama y fortuna que se pudrieron a la intemperie, pero no fue hasta su entrada en la universidad cuando se dedicó con frenesí a la literatura, en coincidencia con su enamoramiento con la Ciencia Ficción. En 1984 participa con un grupo de estudiantes universitarios en la fundación de UBIK, el club de Ciencia Ficción de la USB. Desde UBIK comienza su colaboración en la difusión del género entre los inconversos (casi todo el Universo, excepto una fracción infinitesimal). Colabora en la edición de las publicaciones de UBIK: Cygnus, la revista de Ciencia Ficción (1985), La Gaceta de UBIK (1988) y Necronomicón (1992) y escribe algunos relatos y artículos para dichas publicaciones. Es la época en que su actividad literaria alcanza su máximo: entre 1983 y 1992, fue una época de altísima productividad que permitió perfeccionar su arte de fastidiar a todos con la palabra escrita. En 1984 obtiene el segundo lugar en el Segundo Concurso Literario de Ciencia Ficción con su relato Como una Rata y en 1988 el primer lugar en el primer concurso del cuento universitario (organizado por el Decanato de Estudios Generales de la USB) con su relato Brabante. También participó dos veces en el concurso de cuentos del diario El Nacional, pero como las ediciones en las que participó eran superiores a la veintena y dados los antecedentes numerológicos de los resultados obtenidos, es probable que terminara en los puestos por encima de veinte, aunque de eso no se enteró. Era época de gran actividad en UBIK: talleres literarios, el premio Jugo, foros de cine, producciones de video y súper 8 y exposiciones, y eso estimuló su actividad literaria. Luego el ámbito académico reclamó más atención, también su esposa, pero eso todos lo damos por sentado, y su producción literaria disminuyó a niveles de subsistencia. Entre 1985 y 1997 participa como jurado en los 12 concursos literarios que organizó UBIK (III a XIV). Para 1997 inaugura el portal de UBIK, Asociación Venezolana de Ciencia Ficción y Fantasía y desde esa fecha cumple funciones de webmaster en este portal. Actualmente desempeña labores editoriales con Ubikverso, revista de Ciencia Ficción y Fantasía, y la nueva etapa de Necronomicón, revista de relatos muy cortos de Terror, principalmente. También colabora con Juan Carlos Aguilar en la edición de Desde el Lado Obscuro, fanzine electrónico dedicado a la divulgación de artículos sobre Ciencia Ficción y Fantasía.
Jorge De Abreu también ha publicado relatos en el Periódico Universitario de la USB, Letralia (números 47 y 123), Koinos (número 1), Axxón (números 142 y 146) Alfa Eridiani y Efímero (número 27). Tiene varios cuentos en antologías en papel y mantiene un blog: Yo, Jorge; con consideraciones esquizofrénicas sobre la literatura, la Ciencia Ficción y los eventos de la vida diaria, con especial énfasis en el fútbol.